Camila Belen Gonzalez
Una estructura que sostiene

Si intento construir el camino que María está siguiendo en la última década comienzo por recordar una gran cantidad de cuadernos de hojas cuadriculadas. Esa estructura básica de líneas cruzadas en ángulo recto eran llenadas por una gama amplísima de colores y gran minuciosidad. La rigidez de la trama era traicionada por un manejo desbordante y rico de colores que escapaba con una libertad sorprendente.
Esta serie terminó siendo exhibida en una muestra individual -su primera muestra- en la Casa de Cultura de Vicente López, gracias a la invitación de May Borovinsky por entonces encargada del área cultural del municipio y se llamó “A todo color”.
Visitada por muchas escuelas, fue un punto de partida para todo lo que vino después y el punto de reconocimiento de María hacia sí misma como Artista.
Una instancia posterior tuvo relación con sus visitas a mi taller durante la preparación de una muestra, donde los recortes de imágenes descartadas fueron utilizados por María a manera de “plantillas”. Eran los huecos de siluetas de animales y pájaros que ella utilizaba como estructura de sostén. Los vacíos se convertían en llenos, reemplazaban la cuadrícula. Gran parte de ellos eran imágenes de aves que dieron origen a una seria llamada
“Imagino pájaros” y que acompañó la celebración de apertura de la nueva sede de Fundación Caminos donde ella era partícipe desde los comienzos. Esas imágenes se vendieron como láminas y también fueron impresas en remeras y tazas.
La conciencia de su lugar en el mundo y la manera de percibirse a partir de dejar de lado la idea del “no se puede” y realizando lo que “sí es posible” fue un vuelco decisivo.
El arte es un camino regio para estos descubrimientos y logros. Un campo cada vez más visible e iluminado para valorar los aportes de las personas que trabajan en sus márgenes y que cada vez cuentan con más reconocimiento en muchas partes del mundo. Ferias, bienales, galerías, publicaciones dan cuenta de este campo antes ignorado y cada vez más visible en toda su riqueza y valor.
Actualmente María incorporó nuevas zonas de interés y sigue enriqueciendo su vocabulario pero sobre todo afianzando con fuerza el reconocimiento de su ser.
Nora Aslan, mamá de María
Lo que siento cuando pinto son muchas cosas y siento que puedo lograr hacer un libro, me gusta perfeccionarme para mejorar mi estilo. Yo me tiro, me lanzo, hago como un pantallazo y arranco a pintar. Para mi pintar es mi responsabilidad, es mi trabajo. Cuando arranco a pintar primero agarro el marcador negro que es para mí un color principal, con él empiezo por los contornos y uso los colores para pintar. Pinto en gamas de colores, como por ejemplo las gamas de violetas y rojos. Me inspiro con muchos libros de arte que mi mamá tiene en su taller y miro muchas imágenes de otros Artistas como Picasso, Lucian Freud, Vincent van Gogh, Paul Klee y Xul Solar. Me gusta mucho mostrar el trabajo cuando lo termino, saco fotos con mi móvil y lo mandó a mi profesora Silvina Resnik para que lo suba a su Instagram. Muchas veces trabajo en papeles chicos y luego lo paso en grande por ejemplo en papel de escenografía. Mis trabajos los pueden ver en Facebook y en el Instagram “Taller Silvina Resnik”
María Aslan.
Contacto: noralaslan@gmail.com